Les dejamos en la última entrega en mitad de nuestra incursión en la Chapada Diamantina. Cómo no paramos en este viaje, los ratos para actualizar el blog se van haciendo más complicados. Intentaremos ahora en un huequito aeroportuario...
En Lençois hemos contactado con Washington, que va ser nuestro guía en la excursión estrella de la Chapada, al menos si uno consulta por internet: el 'Vale do Pati'
A la hora concertada (8 de la mañana) nos recoge para un buen trayecto de coche...
Palmeiras, otro de los pueblos de la Chapada, vuelve a ser escala técnica para comprar agua. Para la Fumaça dos días atrás, también paramos aquí |
Otra hora y pico larga de pistas de tierra embarradas (porque estos días está lloviendo) nos llevan al inicio del sendero. En marcha.
Washington nos abre el camino hacia la pared que nos separa del valle de Pati |
En el ascenso por la ladera, la diversidad florística de la Chapada Diamantina se hace evidente.
Una simple roca es un desafío botánico |
Subiendo |
Cómo este arbolito tiene flores se puede identificar la familia... |
Malvaceae...familia de hibiscos y malvas |
Un desnivel de unos doscientos metros separan la planicie inferior del borde de la Chapada.
En la entrada anterior adelantamos que la Chapada Diamantina es un conjunto de rocas, principalmente areniscas y conglomerados, que forman una especie de altiplano (rondando los 1500 m sobre el nivel del mar) surcado por grandes tajos que forman valles exuberantes.
Buena parte del interior del Brasil es un Cratón: la zona interior de una placa continental que durante centenares de millones de años no ha sido afectada por actividad tectónica importante (ni vulcanismo de dorsal o punto caliente, ni zonas de subducción, ni plegamientos por choques de placas...) y tampoco han sido cubiertas por acumulación de sedimentos procedentes de otros lugares. Los cratones, por tanto, son lugares de nuestro planeta que llevan expuestas a la pura erosión de los elementos desde antes de la aparición de los dinosaurios. Decenas de kilómetros de rocas han sido arrastrados a otros lugares y aquí quedan los restos descarnados de rocas antiquísimas. En el caso de la Chapada, arenas y gravas depositadas en las costas de un continente ya desaparecido, muy anterior a Pangea y a que cualquier bicho terrestre o planta se arrastrara por su superficie,
Llegados al reborde, la planicie superior está encharcada por la lluvia que no acaba de decidirse a parar, aunque Washington nos dice que sí, que veremos el valle...
Areniscas precámbricas. Anteriores a la vida en la superficie terrestre (en los océanos, cuando estás rocas se acumularon, sólo había alguitas) |
Marián pisando rocas que fueron una playa hace 1400 millones de años... |
Dani saca fotos a diestro y siniestro de las matas, tiene fotos para una guía de campo completa. Para el blog, irá poniendo unas poquitas de las llamativas, pendientes de sus latinajos.
¡El buffet está espectacular! |
No es que el nivel del agua haya bajado mucho (aunque la fuerza igual un poco) pero Washington ayuda a otro guía a cruzar, demostrando que controla todas las irregularidades del paso. Luego nos cruza a nosotros, primero Marián:
Seguimos, una vez superado el obstáculo:
La Igrejinha que da nombre al lugar |
Plataneras, mangos,... |
En un cobertizo se guarda el material para cargar las mulas |
Tarde de reposo y cenita en la selva |
Después de llover toda la noche, amanece con neblina.
Desayuno variado |
Hoy tenemos excursión de 9km ida, lo mismo de vuelta. Nos vamos valle arriba, de nuevo a los llanos superiores:
Helechos arborescentes, que aquí llaman 'cabeça de negro' |
Sigue todo encharcado y volvemos a la niebla.
Musgos y plantitas de todos los colores tapizan los lugares más encharcados |
El hibisco de ayer |
Donde el agua es más permanente, aparecen bosquetes más densos y umbríos de aspecto tropical.
Algunos lugares rezuman humedad |
Nuestro destino es el Cachoireão, una enorme cascada que salva un salto de unos 280 metros. La neblina deja adivinar la altura, haciéndola más terrorífica que si estuviese despejado del todo.
La roca está literalmente asomada al vacío...
Para acojonar más, nuestro guía se pone en el saliente más alongado al abismo a hacer fotos y vídeos
Marián también quiere asomar |
La roca está literalmente asomada al vacío...
La lluvia de estos días cae desde numerosas bocas por toda la pared vertical, enfrente se ve media caída... |
Pero hay que asomarse a la roca para ver el fondo. En una primera tanda, a lo que es la piedra, Dani no se subió
Estirando el brazo por el hueco no se ve el fondo, también borroso por la bruma. |
Desde el borde mirando para abajo |
La niebla se va abriendo y se vislumbra el valle |
Después de un buen puñado de fotos, bañito en el río y picnic.
Después del rato en el río, volvemos a los 'miradores' del Cachoeirão
Vamos a los dos miradores:
Probablemente no, pero quizás esto sean estromatolitos fósiles ¿¿?? Haberlos, haylos, pero no tenemos mucha idea de la pinta de dichos fósiles... |
El tour que contratamos inicialmente era el de tres días con dos noches, así que hoy acabábamos. Pero días antes habíamos descubierto que teníamos un día extra (cosas de no contar Julio como mes de 31 días) y habíamos pensado pasarlo en Lençois de relax o haciendo alguna excursión extra. Consultándolo con Washington, nos ofrece un plan mejor: dormir en otro pueblo y hacer visita de unas grutas con charcos, desde una distancia más cómoda que salir de Lençois. Así que sí que salimos del Valle de Pati, pero para seguir explorando:
Un colibrí lo suficientemente quieto para fotografiarlo con móvil |
Cuarcitas y areniscas en la parte alta |
El río del otro día tiene mucha menos agua, y se pasa sin problemas ni aventura.
Antes de llegar al pueblo, una parada para ver una cascada:
Una vez en la llanura, y en el coche, nos dirigimos por pista de tierra a Mucugé
Descargando ganado en el camino |
Antes de llegar al pueblo, una parada para ver una cascada:
Nuestro hotel en Mucugé
Hubo que leer a la carrera |
Por la noche vamos a cenar con nuestro guía...resulta que no habíamos llegado a la zona histórica, con calles empedradas y edificios y casas de la época de la fiebre del diamante bien conservadas :
Resumen de la investigación (sacado del librito de la foto de arriba)
-Los diamantes son agrupamientos de átomos de carbono que adquieren una estructura ordenada y cristalina cuando son sometidos a enormes presiones y temperaturas.
- Dichas presiones y temperaturas sólo se consiguen a enormes profundidades, del orden del centenar de km, en la transición de la corteza al manto.
- aunque la Chapada es un Cratón donde la erosión ha desmantelado kilómetros de roca y dejado capas muy profundas expuestas, estás rocas ni de lejos llegaron a estar a la profundidad de formación de diamantes.
- la única forma que los diamantes pueden llegar a la superficie es arrancados por la subida de magmas de cámaras magmáticas muy profundas. Una vez arrancados de allí pueden quedar atrapados en cámaras más superficiales, chimeneas o incluso lavas emitidas a la superficie. En Lanzarote, a menor escala, los cristalitos de olivina son trocitos de la región inferior de la corteza oceánica arrancados por la lava basáltica a unos diez - quince km de profundidad.
- Pero en la Chapada no hay volcanes, ni rocas ígneas de ningún tipo...¿de dónde vienen los diamantes? Pues de rocas volcánicas, que existieron en la zona hace centenares de millones de años. Las areniscas son tan antiguas que ha habido tiempo de que encima se formarán decenas de km de capas de rocas de todo tipo, incluyendo plutónicas y volcánicas conteniendo diamantes, pero además ha dado tiempo de que todas ellas hayan sido intensamente desmenuzadas y eliminadas por la erosión hace ya mucho. Pero los diamantes son muy duros, y cuando ya no quedan vestigios de ninguna de las rocas que los contuvieron, algunos pocos cristalitos aún persistieron dando vueltas en los arroyos desde hace millones de años, hasta que los mineros los sacaron de allí. Imagínense un día en que toda la Lanzarote emergida y sumergida que conocemos desapareciera como polvo arrastrado por los vientos y el mar, y el único recuerdo que quedará de ella fuera unos cristalitos milimétricos de olivina en el fondo oceánico (Lanzarote no desaparecerá así, entre otras cosas porque la olivina es bastante más frágil que el diamante). Eso a escala continente y eon, parece que es lo que pasó aquí...
Bueno, sigamos el paseo. Los poquitos cristalitos que sobrevivieron al paso de los eones, dieron para una efímera prosperidad de estos pueblos:
En el interior hay un lago de un color intenso azul y una transparencia increíble
Dani tiene familia belga, y le llamó la atención este panel al salir de la cueva, hablando de colonos que estuvieron en la zona. |
Seguimos ruta por un atajo, para llegar pronto al otro charco que vamos a ver. Pero hacemos una parada por el camino...
No era para hacer esta foto clásica de Marián en la nada |
Ni para echar un vistazo al paisaje pintoresco de la zona... |
< foto Marián>
Arreglado el problema, nos vamos a cruzar el río
El cruce se hace en barcaza, como hace no mucho en Deltebre...
Y nos sale el rayo de sol para iluminar el fondo...
En la entrada incluyen las gafas y tubo y el chaleco, que no es para que no te ahogues, sino que es obligatorio para que nades moviéndote lo menos posible y para que no tengas la tentación de sumergirte y toquetear el fondo (a más de 20 metros en la parte profunda) enturbiando el agua y estropeando la experiencia al resto de visitantes y afectando a la fauna local: unos pececitos ciegos difíciles de ver...pero hasta vimos uno.
Y acabamos ruta y entrada. Washington nos lleva por el largo viaje de vuelta a casa en Lençois, acabando de rodear todo el Parque Nacional de la Chapada Diamantina.
Ya en Lençois, nos despedimos de nuestro magnífico guía, Washington, que se va merecidamente a descansar, no sin antes dejarnos una habitación cerca de su casa para organizar nuestro equipaje y reposar también nosotros, que esta noche, tarde, nos vamos.
De nuevo en Lençois |
Eso será cuando haya hueco para escribir, e igual no haya muchos hasta septiembre.
Para cerrar la entrada, ponemos un extra de fotos. Washington nos hizo muchas y nos las mandó. Ponemos unas pocas y damos al botón de publicar, que si no no acabamos la entrada hasta llegar a España😇:
Ruta BRASIL 2023
Día 11 julio: Salida Benicarló. Vuelo Valencia-Madrid
Día 12 de Julio: vuelo Madrid -Salvador de Bahía
Día 13 de Julio: Salvador de Bahía: Pelourinho, Comerço...
Día 14 de Julio: Salvador: Pelourinho y Barra
Día 15 de Julio: Salvador: Ribeira, Senhor do Bomfin...
Día 16 Julio: de Salvador a Morro de São Paulo
Día 17 de Julio: Morro, playas atlánticas.
Día 18 de Julio: Morro, vuelta a la isla de Tinharé
Día 19 de Julio: Día en Morro. Playita, faro, surf... Día 20 de Julio Mañana en Morro. Traslado a Gamboa.
Día 21 de Julio: Gamboa
Día 22 de Julio: costa Gamboa - Morro - Gamboa
Día 23 de Julio: de Gamboa a Salvador de Bahía
Día 24 de Julio: de Salvador de B. A Lençois ( Chapada Diamantina)
Día 25 de Julio: Lençois . Vale do Meio
Día 26 de Julio. Trek cascada Fumaça
Día 27 de Julio. Relax en Lençois
Día 28 de Julio. Vale do Pati. Entrada.
Día 29 de Julio. Vale do Pati. Cachoireão
Día 30 de Julio. Salida del valle. Mucugê.
Día 31 de Julio. Poço Encantado y Poço Azul. Lençois. Traslado nocturno.
...y continúa el viaje.
2 comentarios:
Un viaje espectacular y unos viajeros intrépidos!!!!
Gracias por compartir, unas imágenes increíbles, también los comentarios y documentación, que me han hecho sentirme compañero de viaje. Vivo la emoción de cruzar el río, asomarme al precipicio, sumergirme en los pozos... autentica inmersión en la naturaleza.
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