domingo, 3 de junio de 2012

Tsitsikama























Un nuevo capítulo de nuestra aventura sudafricana. Después de la adrenalina y la revoltura de estómago de los tiburones de Mosselbai, continuamos dirección Este a un parque nacional altamente recomendado por Marta y por Francis. El Tsitsikama. Este parque protege varias cadenas montañosas paralelas a la costa con una abundante e interesante flora y fauna. Ya lo habremos comentado en alguna entrada anterior; una de las rutas más populares del país es precisamente el 'Otter trail',(sendero de las nutrias, o algo así), una travesía de cinco días por la costa más solitaria del parque. Tan popular que hay que reservar con muchos meses de antelación, cosa que los que nos conocen saben que nunca hacemos. Pero siempre confiamos en alguna anulación de última hora...con esa esperanza nos dirigimos a una de las zonas de acampada del parque nacional, a la que llegamos poco antes de atardecer...Para cuando estuvimos cómodamente instalados ya era de noche. Pero que paz:

La omnipresente Cruz del Sur (arriba del todo) en una serena noche sudafricana.

Nos vamos de exploración al día siguiente, a ver que pinta tiene el lugar:
Pues vaya, pinta muy bien...



















Un mar salvaje y primitivo con unas costas agrestes cubiertas de bosque. Un paraíso:
'African oystercatcher', Haematopus moquini, en la orilla.



















En muchas carreteras de la región del cabo habíamos visto carteles que advertían de no alimentar a los babuinos, pero nosotros no habíamos visto ninguno hasta ahora:
Baboons en Tsitsikama, Papio ursinus




















En nuestros intentos de hacer el Otter trail nos trasladamos hacia el Este, a otra de las zonas del parque. Pero a medio camino nos encontramos con una autopista que cruza un abismo...


















A la resolución del blog no lo verán en la de arriba, igual si ampliamos un poco...
Chaaaachoooo!!!!!

























Lo que cuelga de la cuerda es Dani, en su lanzamiento al vacío...según reza el cartel de la entrada estamos ante el 'higuest jump of the world'...y puestos a hacer un puenting de éstos, que menos que el más alto...Por cierto, ya saben que a Marián esto de los saltos al vacío no le entusiasma, así que esta vez ella hizo las fotos...

Para bajar un poco la adrenalina damos un paseo por un bosque cercano, una de las pocas manchas decentes de bosque afromontano que quedan en el país:























Aunque recuerda mucho a la laurisilva, estos bosques están más emparentados con los bosques de Podocarpos del sur de Nueva Zelanda. Y caminando nos encontramos con el 'big tree', un ejemplar magnífico de Podocarpus falcatus
























En Storms River Mouth se encuentra la principal oficina del parque nacional y abajo en la costa una zona de acampada, bar, miniplaya y senderos acondicionados con pasarelas espectaculares:























En nuestra espera por poder hacer el Otter, disfrutamos de atardeceres mágicos junto al mar...
Desde la puerta de nuestra tiendita...



















Con luna llena no se podía hacer mucha astronomía, pero sí disfrutar de la paz nocturna, el ruido del mar y de unas buenas salchichas sudafricanas (boereworst)
Disfrutando...y sí, las estrellas son la Cruz del Sur y Alfa-Beta Centauri.




















Los de la oficina ya nos debían conocer como los 'pesados del Otter', pero no hubo hueco; pero para hacernos una idea nos caminamos el trozo que permiten en un día. Finalmente no pasamos los 5 días de Robinsones, pero visto con la perspectiva del viaje completado, aquellos días luego pudimos aprovecharlos para Lesotho, Swazilandia, el Kruguer...¡vaya, cuántas entradas para escribir...! Les dejamos con nuestro paseo por las costas remotas del Tsitsikama...























































1 comentario:

Pino dijo...

Hola guapos, por fin en África. Hoy casualmente le hablé a una amiga de vuestros viajes y aquí estoy mirando con los ojos brillantes las fotos y las experiencias. Justo el año pasado estuve en Namibia, Botswana y algo de Zambia y Zimbawe, y fue increíble. Disfruten y ya saben que aquí en Lanzarote seguimos y espero vengan a verme. Un besazo. Pino