Mactán, Filipinas

 Nuestro viaje por Filipinas va terminando, nos toca ir enfilando hacia la capital del país para tomar un avión y continuar aun unas semanas en el sureste asiático...pero aun tenemos dos días de encuentro con la historia. Estamos a 1 de abril y nos despedimos de la pequeña isla de Malapascua, donde hemos pasado 5 días relajados.

Nuestra vista matinal en Malapascua

Nos toca volver a movernos, y nuestro destino hoy es Mactán, una isla prácticamente pegada a Cebú City (de hecho se cruza por varios puentes) y donde se encuentra el aeropuerto internacional.

Muchos viajeros sólo visitan eso, el aeropuerto. Pero de Malapascua a Mactán el trayecto es larguillo incluso sin contratiempos, y además teníamos una pequeña escusa para hacer noche, más allá de la logística de guaguas y aviones. El barco de Malapascua al muelle norte en la isla de Cebú sale en hora, y el trayecto es apenas de 30 minutos. Al llegar allí se van casi todos en transportes privados, así que nos quedamos casi solos con otro turista. Una furgona nos asegura el viaje, pero habrá que esperar un ratillo. En realidad lo que esperamos es al siguiente barco, casi una hora después, para llenar sitios. Pero a cambio de pagar un poco más (precio final, 400 pesos c/u) el chófer nos acercará prácticamente a la puerta de nuestro alojamiento reservado en Mactán.

Casi 4 horas de furgona después, (el tráfico es lento en Filipinas), nos plantamos en nuestro coqueto hotelito;

Estamos en la población de Lapu-Lapu, capital de la isla, en corto viaje en taxi al aeropuerto. Pero como nuestro vuelo es mañana, nos vamos a nuestro objetivo histórico, no sin antes pasar por algún edificio del centro de la desparramada Lapu-Lapu

En una calle preparan los calderos para los pinchos de la noche, aunque nosotros esta vez no nos vamos a animamar...

Nuestro objetivo está a unos 4 km, y hacia allí nos vamos en el transporte local, el jepney, Son frecuentes, si no vas a sitios raros, y sólo cuesta unos pocos pesos (del orden de 15) que se pasan al chófer de mano en mano porque hay poco espacio.

 

Mactán está en el mapa de la historia. Y el punto clave se llama `Punta Desengaño'. Algo más que eso fue lo que tuvo el ilustre Magallanes cuando estuvo allí. Vamos a visitar el lugar donde finalizó su viaje...y su vida. Porque allí, por querer alardear de poderío español e ir de sobrado, acabo sucumbiendo en una batalla en la que realmente pintaba poco...

Punta Desengaño, hoy en día, es una gran explanada donde de forma un tanto ecléctica se han ido plantando memoriales a las gestas y personajes de la llamada 'Batalla de Mactán':

La bandera filipina ondea en el centro

Uno de los monumentos más antiguos, y destartalados, está dedicado a Magallanes, y su papel en la primera vuelta al mundo. Erigido hacia 1869, es de la época del reinado de Isabel II, reina de todas las Españas, que entonces aún incluían a las Filipinas...

No lejos, en una especie de Ermita-memorial un siglo más moderna, las tornas históricas han cambiado y a quien se ensalza, quizás con más razón si uno es imparcial, es a la figura de Lapu-Lapu, el héroe local, jefe de las huestes que derrotaron a Magallanes...

-Lapulapu-
Here on 27 april 1521, Lapulapu and his men repulsed the spanish invaders, killing their leader,Ferdinand Magellan, thus Lapulapu became the first Filipino to have repelled European Aggression

La 'ermita' incluye un cuadro rememorando la batalla

El propio Lapu-Lapu, además de tener dedicado el nombre de la ciudad principal, también tiene su estatua, en un estilo un tanto 'Conan' 

El cartel está en Tagalu, pero por las fechas y el título debe contar las andanzas de Magallanes hasta el fatídico 27 de abril de 1521, el de la batalla.

Por ponerles un poco en situación, Magallanes y su tripulación habían llegado a las Filipinas, que aun no se llamarían así, un mes antes, el 16 de marzo de 1521. Para entonces la expedición llevaba año y medio de viaje. Con salida definitiva de la Península el 20 septiembre de 1519, había tardado casi tres meses en atravesar el Atlántico, llegando a la altura de Río de Janeiro el 13 de diciembre. Los siguientes meses pasan con la exploración de la costa de lo que ahora es Argentina, invernando en la Patagonia, y, al comienzo del buen tiempo, tirándose más de un mes para cruzar el que luego se llamaría 'Estrecho de Magallanes. No es hasta el 29 de noviembre de 1520 que asoma al inmenso Pacífico con los tres barcos que  le quedan de los 5 que salieron (uno se había hundido y otro se amotinó y volvió a España por el Atlántico). La travesía del Pacífico se hizo larguísima para los marineros. Avistando sólo ocasionalmente algún atolón desértico, se quedaron sin agua ni víveres y el escorbuto hizo estragos, llegando muy depauperados a la isla de Guam el 6 de marzo, 1521, y a la primera isla del archipiélago filipino el 16 de marzo. 

Se ve que en Filipinas se recuperaron rápido, porque pocas semanas más tarde ya estaban en Cebú, ya entonces una de las poblaciones más importantes de la zona. A diferencia de las poblaciones de la Patagonia y Tierra de Fuego, totalmente 'incivilizadas' y sin ningún contacto cultural con Europa, las Filipinas estaban en la esfera de influencia de las culturas asiáticas, con comercio y contacto con China, y pueblos hindúes y musulmanes, que habían llegado desde el Este siglos antes. Magallanes intentó, y medio consiguió, introducir en el cristianismo al gobernante de turno y por ende a la población local, con demostraciones de poderío armamentístico. En un exceso de confianza terminó enredado en una disputa del rajá de Cebú con el jefe local Lapu-Lapu. Magallanes, se ofreció a someterlo sólo con un grupo de soldados castellanos y su armamento, tan convencido estaba de su superioridad...Cómo ya les hemos adelantado el final, y además hay intención de publicar esta entrada, dejamos a continuación un enlace donde se relata con más arte la batalla, por si alguno quiere leer los pormenores:  batalla mactán

Después de la batalla, continúan las vicisitudes de los marineros. Cambios de capitán, asesinatos, barcos abandonados, la llegada a las Molucas, donde cargaron dos barcos de clavo. Uno de ellos, capitaneado por El Cano, acabó llegando a Sanlúcar de Barrameda el 6 de septiembre de 1522, finalizando la primera vuelta al mundo...Decir que el cargamento de clavo que llegó superó con creces el gasto en los cinco barcos y la tripulación inicial de más de 200 marineros. 

Por si quieren más detalles del viaje, aquí. 

Y por enlazar con otros viajes nuestros, recordar que mientras pasaba esto en Filipinas, Hernán Cortés estaba, ese mismo año de 1521, maquinando estrategias parecidas y buscando aliados locales para hacerse con el imperio Mexica, que conquistaría ese agosto...

Volviendo al presente y a este viaje, nosotros continuamos paseando por el parque conmemorativo, que hay más monumentos y placas...

Monumento del Vº Centenario 

Intentamos hacer la foto con la bandera ondeando detrás de las Filipinas en el globo, pero no hacía brisa suficiente

En el otro lado del 'mundo' estamos nosotros

Este año es el 504 aniversario, en unas semanas

La juventud grabando un tik-tok

Lo que es la playa en si, al lado, no es nada del otro mundo. Aproximadamente por aquí debieron llegar los españoles andando desde casi un km de distancia, porque la marea impidió la llegada del barco y sus cañones más cerca...otro error de Magallanes.

No podemos evitar recordar un suceso parecido; otro gran navegante, dos siglos y medio más tarde, cometió el mismo error de Magallanes. Hablamos del capitán Cook, que murió en circunstancias no muy diferentes en un rincón perdido de Hawaii. Allí también estuvimos...

El entorno, a diferencia de donde murió Cook, está bastante urbanizado, y parece que está en crecimiento.

Estamos en periodo electoral

Bueno, ya hemos cumplido con la historia y poca cosa más nos retendrá en la isla de Mactán. 

La valla del recinto está repleta de unas cabezas azules de cartón-piedra representando a los guerreros

Nos volvemos a Lapu-Lapu, que no es que tenga mucho más para nosotros.

Carretera principal

Un centro comercial al que asomamos...

Mañana nos vamos a Manila, nuestra última escala en Filipinas.

Desayuno relajado, nos llevarán en 'Grab' al aeropuerto, la aplicación equivalente a Uber en estas latitudes.

Bahía Mactán-Cebú. Mucho ha llovido desde los tiempos de Lapu-Lapu y Magalhaes...

Continuamos relato y fotos en la próxima entrada, donde daremos un pequeño paseo por la inabarcable Manila. Pronto.